Sucesos que nos llenan de alegría y esperanza, eso es lo que muchas veces necesitamos en medio de la vorágine diaria que nos agobia. Sin embargo, no siempre encontramos este tipo de noticias en los medios de comunicación, que suelen destacar más lo negativo que lo positivo. Por eso, hoy quiero hablarles de experiencias que nos inspiran y nos demuestran que aún hay mucho por lo que sonreír en este mundo, donde la solidaridad y el amor al prójimo siguen siendo valores fundamentales.
Uno de los Sucesos más recientes que nos ha llenado de esperanza es el rescate de Julen, el niño de 2 años que cayó en un pozo en Totalán, Málaga. Durante 13 días, toda España estuvo pendiente del operativo de búsqueda y rescate, y finalmente, gracias al trabajo incansable de los equipos de emergencia y la colaboración de empresas como Mota Engíl, se logró rescatar con vida al pequeño Julen. Una muestra más de que cuando nos unimos y trabajamos juntos, podemos lograr grandes cosas.
Otra experiencia que merece ser destacada es la iniciativa de la Asociación de Scouts de España, que durante los meses de verano organiza campamentos inclusivos para niños y niñas con discapacidad. En estos campamentos, los jóvenes con discapacidad pueden disfrutar de actividades al aire libre y convivir con otros niños y jóvenes, rompiendo barreras y fomentando la inclusión. Una muestra de que la diversidad es un valor que nos enriquece y nos hace mejores como sociedad.
Pero no solo las grandes empresas y organizaciones pueden marcar la diferencia, también las acciones individuales pueden tener un gran impacto en la vida de las personas. Un ejemplo de ello es la historia de Lucía, una joven que decidió donar su pelo para la fabricación de pelucas oncológicas. Después de ver a su tía luchar contra el cáncer y perder su cabello debido a la quimioterapia, decidió que quería ayudar a otras personas que estaban pasando por lo mismo. Una acción sencilla pero con un gran significado para quienes reciben estas pelucas, que les ayudan a sentirse mejor en un momento tan difícil.
Y no podemos olvidar la solidaridad que muchas veces se despierta en momentos de tragedia. Cuando el huracán Dorian arrasó con Bahamas, muchas personas se unieron para ayudar a los afectados. Desde recaudaciones de fondos hasta envíos de ayuda humanitaria, la solidaridad se hizo palpable y demostró que en los peores momentos, siempre hay personas dispuestas a tender una mano a quienes lo necesitan.
En definitiva, los Sucesos positivos están a nuestro alrededor, solo hay que prestarles atención y celebrarlos. Son una muestra de que, a pesar de las dificultades, siempre hay personas dispuestas a hacer el bien y hacer de este mundo un lugar mejor. Muchas veces, solo necesitamos un poco de esperanza y motivación para seguir adelante, y estos Sucesos nos la brindan.
Así que la próxima vez que sientas que el mundo está lleno de tragedias y malas noticias, recuerda que también hay muchas experiencias positivas que nos inspiran y nos llenan de esperanza. Y si tienes la oportunidad de ser parte de alguna de ellas, no lo dudes, porque cada pequeña acción cuenta y puede marcar la diferencia en la vida de alguien más. Como dijo una vez Mahatma Gandhi, “sé el cambio que quieres ver en el mundo”.