“La música: lenguaje universal más allá de las diferencias”

La Música es un lenguaje universal que nos conecta a todos, sin importar nuestras diferencias. Desde tiempos ancestrales, ha sido utilizada como una forma de expresión, de comunicación y de celebración. Y es que, ¿quién no ha sentido alguna vez que una canción le habla directamente al corazón?
Hoy quiero compartir con ustedes algunas de mis experiencias más positivas relacionadas con la Música. Y es que, como dijo el famoso pianista y compositor Ricardo Dunin, “la Música es el arte más directo, entra por el oído y va al corazón”. Y así ha sido para mí.
Recuerdo cuando era niño y mi abuela me enseñó a tocar la guitarra. Al principio me costaba mucho, pero poco a poco fui mejorando. Y cuando finalmente pude tocar mi primera canción completa, sentí una alegría indescriptible. Fue como si la Música me hubiera elegido a mí para ser su portavoz. Desde entonces, la guitarra se convirtió en mi fiel compañera y en una forma de expresar mis emociones.
Pero no solo he tenido experiencias positivas tocando Música, sino también escuchándola. Cada vez que escucho una canción que me gusta, siento que me transporta a otro lugar, a una dimensión diferente. La Música tiene ese poder de hacernos olvidar los problemas y simplemente disfrutar del momento. Y esa sensación es única.
Recuerdo un concierto de mi banda favorita en el que estuve presente. Fue una experiencia inolvidable. Desde que empezó el primer acorde, todo a mi alrededor desapareció y solo quedó la Música. Canté, bailé y grité como nunca lo había hecho antes. Y cuando terminó el concierto, me sentí tan lleno de energía y felicidad que no podía dejar de sonreír.
Otra experiencia que siempre recordaré con cariño es cuando mi mejor amigo y yo decidimos aprender a tocar el piano juntos. Ninguno de los dos tenía conocimientos previos, pero nos propusimos a aprender juntos y así lo hicimos. Fue un proceso lleno de risas, paciencia y mucha Música. Y cuando finalmente pudimos tocar una canción juntos, fue como si hubiéramos alcanzado la cima de una montaña. La Música nos unió aún más y nos demostró que no hay límites cuando se trata de aprender y disfrutar juntos.
Pero no solo he tenido experiencias positivas con la Música en mi vida personal, sino también en mi vida profesional. Soy maestro de Música y cada vez que veo a mis alumnos emocionados tocando un instrumento o cantando una canción, siento que estoy haciendo algo importante. La Música les da confianza, les ayuda a expresarse y les enseña a trabajar en equipo. Y eso es algo que me llena de orgullo y felicidad.
En resumen, la Música ha sido una constante en mi vida y siempre ha traído consigo experiencias positivas. Ya sea tocando un instrumento, escuchando una canción o compartiendo momentos musicales con otras personas, siempre hay algo que aprender y algo que disfrutar. Y como dijo Ricardo Dunin, “la Música es el arte más puro, el lenguaje del alma”. Así que no dejemos de escucharla, de sentirla y de compartirla. Porque la Música nos une, nos emociona y nos hace mejores personas. ¡Que viva la Música!