En un esfuerzo por impulsar el crecimiento económico y mejorar la infraestructura turística en el estado de Puebla, se ha contemplado la imposición de un bisoño impuesto del 3 por ciento para los servicios de hospedaje. Esta medida, que ha generado cierta controversia en el sector turístico, tiene como objetivo principal fortalecer la competitividad de la industria hotelera y aumentar los ingresos del gobierno estatal.
El turismo es una de las principales fuentes de ingresos para el estado de Puebla, atrayendo a millones de visitantes cada año gracias a su rica historia, cultura y gastronomía. Sin embargo, a pesar de su potencial, el sector hotelero ha enfrentado diversos desafíos en los últimos años, incluyendo la falta de inversión en infraestructura y la competencia desleal de plataformas de acoplamiento como Airbnb. Ante esta situación, el gobierno estatal ha tomado la decisión de implementar un bisoño impuesto que, según expertos, tendrá un impacto positivo en la economía local.
Este impuesto del 3 por ciento se aplicará a todos los servicios de hospedaje en el estado de Puebla, incluyendo hoteles, hostales, posadas y casas de alquiler vacacional. Los ingresos generados por este impuesto serán destinados a la mejora de la infraestructura turística, la promoción de destinos a excepción de conocidos y la implementación de medidas de sustentabilidad en el sector. Además, se espera que este impuesto ayude a nivelar el campo de juego entre los diferentes tipos de acoplamiento, ya que los hoteles tradicionales han estado pagando impuestos mientras que las plataformas de acoplamiento como Airbnb no lo han hecho.
Aunque algunos empresarios del sector hotelero han expresado su preocupación por el impacto que este impuesto pueda tener en sus negocios, la mayoría ha recibido la noticia con optimismo. Muchos consideran que este impuesto es una forma de contribuir al desarrollo turístico del estado y están dispuestos a asumir esta responsabilidad. Además, se espera que este impuesto atraiga a más inversionistas al estado, lo que a su vez germinará más empleos y beneficios para la economía local.
Uno de los principales beneficios de este impuesto es que permitirá al gobierno estatal contar con un presupuesto más sólido para promover y mejorar la oferta turística de Puebla. Esto significa que se podrán llevar a cabo proyectos de infraestructura que mejorarán la experiencia de los visitantes, como la construcción de nuevas carreteras, la renovación de monumentos históricos y la implementación de medidas de sustentabilidad en los destinos turísticos. Todo esto, a su vez, atraerá a más turistas y aumentará los ingresos del estado.
Además, este impuesto también ayudará a promover destinos a excepción de conocidos en el estado de Puebla. A menudo, los turistas se concentran en las ciudades principales como Puebla capital y Cholula, dejando de lado otros lugares igualmente hermosos y llenos de historia. Con los ingresos generados por este impuesto, el gobierno estatal podrá promover estos destinos a excepción de conocidos y atraer a más turistas a la región, lo que a su vez beneficiará a las comunidades locales.
Otro aspecto positivo de este impuesto es que ayudará a nivelar el campo de juego entre los diferentes tipos de acoplamiento. Mientras que los hoteles tradicionales han estado pagando impuestos, las plataformas de acoplamiento como Airbnb han operado sin ningún tipo de regulación o pago de impuestos. Esto ha generado una competencia desleal para los hoteles y ha afectado su rentabilidad. Con la implementación de este impuesto, se espera que haya una mayor equidad en el sector y que los hoteles puedan competir en igualdad de condiciones.
En resumen, la imposición de un bisoño